miércoles, 20 de abril de 2016


C.D. HELENA JIMENEZ SALAS
TRUMATISMOS DENTOALVEOLARES Y FÉRULAS
 
 
ETIOLOGÍA
Las causas de los traumatismos dentales son de naturaleza compleja y están influenciadas por diferentes factores, incluyendo a la biología humana, comportamiento y el medio ambiente.

Los datos acumulados por las estadísticas indican cifras preocupantes acerca de la incidencia y prevalencia de los traumatismos dentales. Las cifras recolectadas en diferentes países, no difieren significativamente en cuanto a la etiología de estos sucesos.

En un estudio realizado por un grupo de investigadores de la Universidad de San Francisco en Brasil, se tomó una muestra a 355 dientes permanentes (de pacientes sometidos a tratamiento en la Clínica de dicha Academia), donde totalizaron 363 traumatismos dentales. Sus datos concordaron con los de Andreasen, concluyendo que las causas más comunes de lesiones dentales fueron:

A) caídas diversas, seguidas de golpes, accidentes automovilísticos y deportes de contacto, B) los individuos de sexo masculino sufren 2,4 veces mas lesiones que el sexo femenino, y que las edades más afectadas oscilan entre los 11 y 15 años de edad.

The Geneve University (Suiza) creó junto con el Departamento de Ortodoncia y Odontopediatria, una Unidad de Emergencia, la cual se ocupa de los casos de urgencias dento-alveolares en horario diurno y nocturno los 365 días del año. La edad de los pacientes incorporados a un estudio especializado, abarca entre 1 y 16 años de edad. Las lesiones observadas afectaron más a la dentición temporal (78%) que a la dentición permanente (39.1%).

Las causas de los accidentes difieren significativamente entre ambos grupos y con la edad. Una parte importante de estos accidentes en dentición permanente se relacionaron con caídas de bicicletas (12.7%). Los percances automovilísticos (4%) y deportes de grupos (19%) fueron el origen más representativo de los traumas en varones, mientras que los accidentes más frecuentes en las niñas se debían a deportes individuales (15%) e incidentes en el hogar. Igualmente se observó que los accidentes de tráfico, actos de violencia y daños por práctica de deportes; se incrementan con la edad.

Los datos arrojaron las siguientes cifras: los incisivos superiores en ambas denticiones se encuentran afectados en mayor proporción.

Este proceso de indagación científica explica que los traumas dentoalveolares son más frecuentes en varones (60%) que en las hembras ( 39,4%).

Existen factores que aumentan significativamente la susceptibilidad a las lesiones dentales como: oclusión clase II, overjet que excede los 4 mm. , labio superior corto, incompetencia labial y respiración bucal

Para el pronóstico de los dientes traumatizados, es de vital importancia, que un adecuado tratamiento sea efectuado lo más pronto posible después del accidente. Se recomienda atraer la atención de padres, representantes, educadores, profesionales de la salud, enfatizando que siempre que ocurran estos eventos desafortunados se debe recurrir al Odontólogo, y no solamente cuando existe dolor o se ha perdido la estética.

 INSPECCIÓN

Es de vital importancia reconocer el estado general de niño, observar si perdió el conocimiento, vomitó, si presenta cefaleas y si su estado de orientación es óptimo.
En primera instancia se deben inspeccionar los tejidos blandos , tejidos duros y luego los tejidos de soporte( tablas óseas). Se debe desinfectar la zona afectada. Si existen soluciones de continuidad profundas usualmente se amerita la sutura.
Si no se encuentra el fragmento del diente traumatizado, y existen heridas en los tejidos blandos, se deben tomar radiografías de dichos tejidos.
Principalmente el lapso de tiempo entre el traumatismo y la atención profesional no debe ser demasiado largo, y si el agraviado necesita atención médica especializada ( Pediátrica, Neurológica, Traumatológica, etc.), se debería notificar al Odontólogo simultáneamente, para que el niño reciba atención conjunta si es posible.


CLASIFICACIÓN

El propósito de clasificar las lesiones dentales estriba en obtener una descripción de condiciones específicas, que permita a los odontólogos reconocer y tratar de utilizar los remedios terapéuticos recomendados. La clasificación actualmente recomendada se basa en la clasificacion de las enfermedades de la Organización Mundial de la Salud (OMS) modificada por Andreasen y Andreasen. Esta clasificación es utilizada por la Asociación Internacional de Traumatología Dental y es preferible a otros sistemas previos anacrónicos.

  • Tejidos blandos
    • Laceraciones
    • Contusiones
    • Abrasiones
  • Fracturas dentarias
    • Fracturas del esmalte
    • Fracturas de la corona: no complicadas
    • Fracturas de la corona: complicadas
    • Fracturas de corona y raíz
    • Fracturas radiculares
  • Lesiones por luxación
    • Concusión dentaria
    • Subluxación
    • Luxación con extrusión
    • Luxación lateral
    • Luxación con intrusión
    • Avulsión
  • Lesiones de los huesos de la cara
    • Apófisis alveolar: maxilar o mandíbula
    • Cuerpo del hueso maxilar o mandibular
    • Articulación temporomandibular

 PAUTA EXPLORATORIA CLÍNICA 

1. Lesiones de los tejidos blandos: mucosa gingival, vestibular, palatina, yugal (pared interna de las mejillas), labial o lingual. 

2. Lesiones dentarias : fracturas o fisuras coronarias, movilidad o desplazamiento de los dientes, decoloración, exploración vitalométrica exploración oclusal. 

3. Lesiones óseas: fracturas alveolares, fisuras de las corticales externa o interna, etc. 

 

EN LA EXPLORACIÓN RADIOGRÁFICA

 http://www.iztacala.unam.mx/rrivas/imagenes/trauma/luxacion2.gif

1. Estado de la formación apical 

2. Rarefacción periapical o perirradicular 

3. Fracturas radiculares, luxación o desplazamiento radicular 

4. Resorción dentinaria o cementodentodentinaria 

5. Fracturas o fisuras óseas, cuerpos extraños, etc. 

 

CLASIFICACIÓN DE LAS LESIONES SEGÚN OMS SEGÚN LOUIS H. BERMAN  LOS TRAUMATISMOS DENTALES SE CLASIFICAN EN :

1)  Fracturas coronarias:

a) Fisuras y fracturas del esmalte

b) Fractura amelodentinaria sin afectación pulpar (Fractura coronaria no complicada)

c) Fractura amelodentinaria con afectación pulpar (Fractura coronaria complicada).

 

2) Fracturas radiculares

a) Fracturas radiculares intraalveolares 

b) Fractura coronoradicular. 3) Luxación  a) Concusión b) Subluxación c) Luxación lateral  d) Intrusión e) Luxación extrusiva. 4) Avulsión (1).

1. Fracturas coronarias Las más comunes  son las caídas, deportes de contacto, accidentes de tráfico y laborales, las cuales constituyen un gran porcentaje de las lesiones traumáticas

1.1.Fisuras y fracturas del esmalte

Diagnóstico Las fisuras se presentan como una grieta  en el esmalte. Pasan desapercibidas con frecuencia, pero se pueden mostrar mediante transiluminacion. No son visibles en la radiografía, aunque a veces se ve una línea radiolúcida que atraviesa la corona. En el  síndrome del diente fisurado, las fisuras, producen  necrosis pulpar, se vuelven  visibles por medio del microscopio usando  azul de metileno.  Las fracturas del esmalte afectan solo a este tejido. Se producen principalmente en la región anterior, en el borde incisal o en un ángulo interproximal. No suelen mostrar sensibilidad a las variaciones de temperatura, deshidratación o presión. Las pruebas pulpares pueden ser negativas provisionalmente.

Tratamiento Las fisuras no requieren tratamiento, pero si son múltiples, se sella el esmalte con un adhesivo con el fin de impedir las tinciones derivadas del tabaco, alimentos o  bebidas. El tratamiento de las fracturas de esmalte dependerá de la cantidad de tejido perdido, pudiendo  ser suficiente una simple remodelación, pero si  afectan al ángulo  será necesaria una restauración,  aliviando la oclusión para evitar una oclusión traumática.

Pronóstico Es bueno para ambos tipos de lesiones. La probabilidad de supervivencia tras una fisura del esmalte oscila entre el 97 y el 100%.

1.2 Fractura amelodentinaria sin afectación pulpar Diagnóstico Afecta al esmalte y a la dentina pero sin exposición pulpar.

El diente presenta generalmente sensibilidad a las variaciones de temperatura, deshidratación y presión, Se debe tomar vitalidad pulpar aunque pueden dar resultados negativos durante un tiempo .La radiografía de aleta de mordida o bite-wing es un valioso auxiliar.

Tratamiento Se reconstruye con resina compuesta. Una opción  es la adhesión del fragmento astillado sobre la corona, la cual puede ser usada de manera exitosa

Pronóstico Si se manipulan  los materiales de restauración de manera adecuada, el pronóstico va a ser bueno. Dientes restaurados usando la  reinserción del fragmento fracturado a un control de 24 meses tuvieron todo un resultado óptimo.

1.3 Fractura amelodentinaria con afectacion pulpar Diagnóstico Afecta al esmalte y la dentina con una profundidad suficiente para dar lugar a   una exposición pulpar.

El diente suele ser sensible a las variaciones de temperatura, deshidratación y presión. La respuesta a las pruebas pulpares suele ser positiva a menos que exista una luxación al mismo tiempo. El examen radiográfico añade información de la etapa del desarrollo radicular o el tamaño de la pulpa  ayudando a determinar el tipo de tratamiento a realizar.

Tratamiento El objetivo es la conservación de una pulpa vital sin inflamación, separada biológicamente por una barrera continua de tejido.

2. Fracturas radiculares  Su incidencia es del 5 al 7,7 %. Se da en los incisivos superiores en un 75% generalmente entre los 10 a 20 años. Son más afectados los varones. El 40% está asociado a lesiones en el hueso alveolar y tejidos blandos y en el 45%  resultaron afectados los dientes adyacentes. Pueden ser verticales  o horizontales. Por su localización, se clasifican de  tercio coronal, medio o apical. Dan lugar a nuevos cortes en la raíz denominados fragmentos coronal o apical y el espacio  entre ambos se llama diastasis.

2.1 Fracturas radiculares intraalveolares Los dientes tienden a mostrar una ligera extrusión. Dependiendo de la localización  generalmente existe alguna movilidad del fragmento coronal, con diferentes grados de sensibilidad a la percusión. Puede existir cierto sangrado procedente del surco. Con frecuencia la corona clínica cambiara de color entre marrón y gris.  Los dientes muestran  una tendencia a permanecer vitales. El examen de los dientes adyacentes y antagonista no deben ser ignorados. La visualización radiográfica resulta difícil, por lo que deben realizarse radiografías con diferentes angulaciones verticales, aunque la localización y angulacion de las fracturas se observan  mejor con  las imágenes obtenidas por Cone Beam. Andreasen  los ha dividido en 4 categorías según la cicatrización:

1. Fusión calcificante de los fragmentos. Hay una transición radiopaca entre los fragmentos, similar a la reparación por callo óseo. Se dá en el 30 % de los casos. 2. Banda de tejido conjuntivo entre los fragmentos. Existe un espacio radiolúcido estrecho entre los fragmentos. Se produce en el 43% de los casos. 3. Hueso entre los fragmentos. Existe una lámina dura intacta alrededor de cada fragmento, con depósito de hueso en la diastasis. Se dá en el 5 % de casos. 4. Tipo de granulación entre los fragmentos. Diastasis más ancha con  imagen radiolúcida entre fragmentos. No es cicatrización. Se dá en el 22% de los casos.

Tratamiento

Recolocar manualmente el fragmento coronal en su posición Se colocara una férula semirrígida únicamente si existe una movilidad considerable  por no  más de 4 semanas. Como el 80% de los dientes conservan su vitalidad no suele ser necesario el tratamiento endodóntico, sobre todo si la fractura es intraósea, pero en caso el fragmento coronal se considere sin vitalidad  debe iniciarse el tratamiento endodóntico, para lo cual, existen varias opciones de tratamiento:

 1. Tratamiento del fragmento coronal: Si es ancho la abertura apical del fragmento coronal debería iniciarse un procedimiento de apicoformacion en este fragmento. 2. Tratamiento del fragmento coronal y extracción del apical: Si no hubo curación tras el tratamiento del fragmento coronal, se retira quirúrgicamente el fragmento apical,  sellando apicalmente el fragmento coronal con obturación retrograda.

3. Tratamiento de los fragmentos coronal y apical al mismo tiempo: Es casi imposible lograr el sellado cuando se acceden de forma simultánea las aberturas de los fragmentos coronal y apical. Este tratamiento tiene la tasa de éxito más baja.

4. Extracción del fragmento coronal y tratamiento del fragmento apical: Puede ser necesario un alargamiento de corona clínica. Una alternativa es la extrusión ortodóncica del fragmento apical previa endodoncia.

Pronóstico Se debe informar al paciente del pronóstico antes del plan de tratamiento ya que pueden presentan las siguientes secuelas: supervivencia pulpar con obliteración del conducto, reabsorción interna o externa y pérdida de hueso de la cresta. Son  factores predictivos del pronóstico: Cuanto más apical  menos probable que  pierda la vitalidad pulpar(cuanto más coronal peor pronóstico), un aumento de la diastasis favorece la necrosis del fragmento coronal e incrementa su movilidad, una fractura horizontal  tiene mejor pronóstico que un  vertical ,lo mismo que una simple de una múltiple o conminuta ,la pérdida de una pared ósea alrededor  dificulta  el  proceso de reparación y los dientes  con raíces inmaduras  tienen mayor probabilidad de curación al igual que las niñas en comparación con los niños.

2.2 Fracturas coronoradicular

Diagnóstico No se consideran verdaderas fracturas radiculares , porque no se encuentran completamente rodeadas de hueso .Consisten en la fractura de la corona y la raíz. Son el 5% del total. Los incisivos centrales superiores son los más afectados. Con frecuencia son oblicuas. Se puede presentar dolor a la masticación, movilidad del trozo fracturado, lesión o edema gingival. Pueden afectar a  premolares y molares, sobre todo si están con tratamiento endodontico. Si  los cabos de la fractura están separados serán visibles en la radiografía.

Tratamiento A veces es necesario extirpar los fragmentos con movilidad, por lo que se debe  analizar la fractura para ver posibilidad de tratamiento de conducto, colgajo periodontal, ortodoncia o exodoncia por lo que será necesario un tratamiento multidisciplinario.

2. Luxación Es la dislocación del diente de su posición  fisiológica normal  en el alveolo. Constituye el 22 al 61% de  las lesiones dentarias, siendo el incisivo central superior el más afectado. Las concusiones y las subluxaciones son el 30% y 77% de todas las luxaciones.

3.1 Concusión

Diagnóstico Es una lesión  donde el traumatismo no tuvo la intensidad suficiente para provocar la ruptura del ligamento periodontal , el diente se encuentra en su posición normal y no muestra movilidad anormal. Puede mostrar sensibilidad a la percusión o a la masticación. No debería existir  sangrado alrededor del surco gingival (1).  Inicialmente puede no responder a las pruebas de sensibilidad pulpar. Radiográficamente se manifiesta un ensanchamiento del espacio del ligamento periodontal  que puede localizarse solo en la porción apical y desaparecer después de un tiempo si el traumatismo fue de baja intensidad.

Tratamiento No hay terapia local inmediata. El alivio articular es el procedimiento aconsejable. Se puede prescribir  un antiinflamatorio. En la amplia mayoría  de los casos no está indicado el tratamiento del conducto radicular. No se recomienda   ferulización. 

3.2 Subluxación

 Diagnóstico Es  semejante a la concusión y se produce cuando el impacto sobre el diente es de mayor intensidad. El diente permanece en su posición original, sin embargo existe cierta movilidad y alguna sensibilidad a la palpación por vestibular de la apófisis alveolar. Es muy probable que el diente este sensible a la percusión y a la masticación. Con frecuencia existe un ligero sangrado en el surco que rodea al diente. Pueden no responder a las pruebas de sensibilidad pulpar en un  principio. Radiográficamente se puede detectar un ensanchamiento leve del espacio periodontal, especialmente en las zonas laterales de la raíz dentaria. No obstante, dicho incremento puede ser tan leve que no se detecte en la película Tratamiento No hay terapia local inmediata. El cuidado de la armonía oclusal y la prescripción de un antiinflamatorio es lo aconsejable.  En  la mayoría de los casos no requiere ferulización excepto en casos de movilidad exagerada o que se prevea un traumatismo adicional  (pacientes que practican múltiples deportes) donde  se aconseja una contención semirrígida por dos semanas.

3.3 Luxación lateral

Diagnóstico El diente se desplaza hacia vestibular o lingual/palatino, pero la zona cervical está alineada con los dientes adyacentes, porque no existe desplazamiento vertical. Casi  siempre están afectados dos o más dientes. Es  raro  una luxación lateral pura, en la mayoría de los casos, presentará un componente lateral como extrusiva. Es útil la Flujometría Laser Doppler LDF  en la detección de la vitalidad pulpar. Radiográficamente se observa un ensanchamiento del ligamento periodontal mayor del lado del impacto

Luxación lateral sin desplazamiento apical: La parte apical permanece en su localización original dentro del alveolo. Suele existir cierto sangrado en el surco. A la palpación habrá un contorno normal de la apófisis alveolar y a la percusión originara un sonido normal o ligeramente sordo. Existe gran probabilidad de que el paquete vasculonervioso se encuentre intacto. Los dientes pueden no responder a las pruebas de sensibilidad en un principio, durante semanas e incluso meses. Luxación lateral con desplazamiento apical: El diente se queda anclado firmemente en su nueva posición. A la percusión provocara un sonido metálico sordo,  La palpación de las tablas del hueso alveolar puede indicar la nueva localización del ápice. Puede existir mucho sangrado en el alveolo donde se ha desplazado la porción apical de la raíz.  Mostrara un ensanchamiento del LPO alrededor de la porción media y coronal de la raíz, pero será normal o estará ligeramente comprimido a nivel del ápice. Habrá una alta probabilidad de  daño del paquete vasculonervioso, Los dientes no responden en un principio a las pruebas de sensibilidad pulpar.

Tratamiento El tratamiento de urgencia consiste en la recolocación del diente con el menor traumatismo posible sobre el ligamento periodontal. Debe administrarse anestesia local, aconsejándose no usar con vasoconstrictor. Los dientes con desplazamiento lateral pero no apical, requieren ferulización que debe ser flexible  y debe retirarse en el plazo de 7 a 10 días. En caso  sea  necesario, no debe iniciarse el tratamiento endodóntico en la cita de urgencia, sino en una cita posterior de 7 a 10 días. En dientes inmaduros no deberá realizarse de antemano ningún tratamiento endodóntico. Se prescribirá analgésicos adecuados, pautas de higiene oral y enjuague con clorhexidina al 0,12% dos veces al día durante al menos una semana. La doxiciclina puede  tener efecto beneficioso sobre la reducción de la reabsorción radicular.

3.5 Luxación extrusiva Diagnóstico El diente se afloja y sobresale de forma importante de su alveolo en comparación con los dientes adyacentes. Se debe confirmar  si todo el diente se ha extruido o si es únicamente fragmento coronal derivado de una fractura radicular. Dependiendo de cuanto se haya extruido el diente, la pulpa puede responder o no a las pruebas de vitalidad. Se debe preguntar si se ha recolocado el diente en su alveolo antes de la visita al dentista. Radiográficamente se observa un incremento importante del espacio periodontal. Este ensanchamiento puede acentuarse en la región apical

Tratamiento El diente debe recolocarse con suavidad en el alveolo. Requiere ferulización flexible y debe retirarse en el plazo de 7 a 10 días. Se deben prescribir  los analgésicos adecuados, pauta de higiene oral y enjuague con clorhexidina al 0,12% dos veces al día durante al menos una semana.

3. Avulsión Situación clínica en la que el diente sale por completo de su alveolo tras un impacto traumático. De todos los traumatismos es  la más grave.

Etiologia y epidemiologia Entre el 1 y 16% de los traumatismos dentarios los incisivos centrales superiores son los más afectados, mayormente debido a actividades deportivas, ocio y accidentes de tránsito. El grupo de edad más afectado es el  7 a 10 años.

Diagnóstico Se observa el alveolo solo sin su diente correspondiente, el cual a veces  puede estar alojado en los tejidos blandos adyacentes. Se debe evaluar el área de la avulsión y determinar si hay fractura del reborde alveolar correspondiente

Tratamiento En el lugar de la lesión: El objetivo es reimplantar el diente en su alveolo lo antes posible, si resulta poco práctico, se debe  conservarlo en un  medio de transporte que puede ser la Solución Salina Tamponada de Hank (SSTH) (es el más recomendado), leche o solución salina fisiológica, si no se dispone de ninguno de ellos, se  colocará el diente en el vestíbulo bucal, nunca recomendándose  el agua; el agua de coco  y el propoleo son buenas opciones , además se debe evitar alterar la temperatura  del medio de transporte  En la consulta: Si el diente no fue reimplantado (enfoque  agudo) y  se conservó   en un medio adecuado debe mantenerse en el mismo mientras se realizan las evaluaciones clínicas, si no, se colocará  en el mejor medio  de conservación. Se lavará el alveolo con solución salina estéril, y si han colapsado las paredes, se reposicionará con un instrumento romo. Hay cuatro opciones terapéuticas:

 1. Tiempo fuera del alveolo en seco inferior a 1 hora o  conservado en un medio adecuado con ápice cerrado. Reimplantar el diente lo antes posible  eliminando los residuos con un chorro de solución salina. 2. Tiempo fuera del alveolo en seco inferior a 1 hora o  conservado en medio adecuado con ápice abierto  Sumergir el diente en una solución de doxiciclina (1 mg. por cada 10 ml de solución salina fisiologica) antes de la reimplantación.

FÉRULAS COMO TRATAMIENTO EN LOS TRAUMATISMOS DENTOALVEOLARES.
El objetivo principal de la ferulización es proteger el tejido de soporte para así permitir la reparación o la regeneración de las fibras del ligamento periodontal y hueso. Éste debe ser un procedimiento fácil y rápido para el odontólogo, donde la férula colocada debe permitirle al paciente, comodidad y una buena higiene, la anulación de trauma adicional durante la cicatrización, así como una movilidad fisiológica para promover la reparación del tejido periodontal. Por lo tanto, este procedimiento es el indicado y que todo odontólogo debe aplicar al llegar el paciente al consultorio con un trauma dentoalveolar.

 En los casos en los que el objetivo es establecer una adecuada cicatrización ósea, las férulas deben ser totalmente rígidas y estables. El factor primordial exigible a una férula es que una vez aplicada, el diente conserve cierto grado de movilidad en sentido vertical, pero manteniendo un adecuado soporte lateral, lo que favorecerá la reparación del ligamento periodontal. La fisiología del diente no se altera, o lo hace mínimamente, cuando se aplican férulas no rígida. Igualmente, no existe ningún beneficio si se extiende la ferulización a varios dientes, por lo que sólo es necesario limitarla al diente adyacente. Las férulas se clasifican según su rigidez:

• Flexible: Aquellas que permiten más movilidad que la normal del diente no lesionado.

• Semirrígidas: Son aquellas que mientras están colocadas permiten que el diente traumatizado tenga una movilidad en los tres planos del espacio, que un diente sano Son las más fisiológicas para la cicatrización del ligamento periodontal y la pulpa.

• Rígidas: Se denomina así a las férulas que permiten menos movilidad que la normal de un diente. Suelen ser las férulas utilizadas en cirugía para el bloqueo óseo pero están contraindicadas en traumatología dentaria, ya que con mucha frecuencia causan lesiones severas.
 Tipos de férulas utilizadas como tratamiento de los traumatismos bucodentales.

• Férula de suturas: El tipo más simple de fijación es una sutura colocada sobre el borde incisal desde la encía palatina/lingual. Esta puede ser utilizada para prevenir que los incisivos reposicionados se extruyan, lo cual será efectivo por un corto periodo de tiempo.Estas férulas han demostrado mejorar el pronóstico de los dientes autotransplantados en comparación con las férulas rígidas23, pero se encuentra en desuso actualmente.

• Dispositivos ortodóncicos:Se ha sugerido el alambre de ligadura ortodóncica adherido al diente con resina o con un bracket. Sin embargo, los alambres ortodóncicos para brackets y la resina pueden causar irritación en la mucosa bucal, dificultad para su higiene o incomodidad, especialmente al inicio del periodo de ferulización. Además, las demandas de una ferulización pasiva con el diente en una posición neutral, peligra al unir los brackets por alambres ortodóncicos triangulares, por lo que se recomienda aplicar alambres de acero maleable.El alambre para ferulizar no se sujeta mediante brackets porque, en ese caso, existe un gran riesgo de que no sea pasivo y de que inadvertidamente se apliquen fuerzas ortodóncicas que dificultarían la reparación biológica. En caso que el alambre sea sujetado mediante brackets se debe evitar el uso de ligas, por lo cual estos serán sostenidos mediante puntos de resina colocados sobre los mismos, y el alambre indicado siempre será el de acero. En caso de uso de ligadura ortodóncica, ésta será colocada mediante un tejido o entorchado en forma de ocho entre los brackets para ejercer así una fijación y no un movimiento ortodóntico; de igual manera estos serán sostenidos mediante puntos de resinas en los brackets.

• Férula de resina: Se caracteriza por ser estética y fácil de realizar, pero frecuentemente se fractura en el área interdental, ya que el material es frágil. Esta férula es rígida y por lo tanto viola la demanda para la ferulización en la mayoría de los casos Además, debido a su similitud en el color y la fuerza de adhesión al esmalte grabado, es difícil de retirar sin dañar la estructura dental subyacente. En el caso que se coloquen puntos de resina a nivel interproximal en tercio incisal se considera una férula flexible, férula recomendada en la guía de traumatología dental de la Asociación Internacional de Traumatología dental del 2011.

 • Fijación de alambre resina: Una de sus ventajas principales es que la férula se construye con materiales que generalmente están disponibles en el consultorio. Este tipo de ferulización puede ser modificada fácilmente a una férula rígida cambiando la dimensión del alambre o añadiendo resina a lo largo de la superficie vestibular de alambre hasta el espacio interdental. Se recomienda el uso de alambres de ortodoncia 0,3 o 0,4 mm.

 

 

 • Férula de fibra de vidrio: Varios estudios han descrito su uso frecuente en lugar del alambre.Una mecha de fibra de vidrio es impregnada en resina composite sin material de relleno. La flexibilidad puede ser variada con las capas de extensión de la férula.Este tipo de férulas brindan una gran estética y baja incidencia a la fractura.

 • Fijación de nylon resina: Algunos autores como Soares y Goldberg, reportan el uso de Nylon de 20-30 libras de presión en sustitución del alambre de ortodoncia en ferulizaciones semirrígidas. Esta brinda un aspecto más estético, es resistente, funcional y compatible con los tejidos. En casos de ausencias dentarias o en una dentición mixta, donde los dientes vecinos no están totalmente erupcionados, es necesario cubrir el área edéntula, con lo cual se puede hacer un refuerzo con alambres ortodóncicos, líneas de nylon o fibras de vidrio fusionadas con la resina.

 • Materiales metálicos de ferulización prefabricados: Las férulas prefabricadas hechas de titanio (FTT) han sido reportadas. Esta férula tiene solo 0,2mm de grosor y puede ser doblada fácilmente con los dedos y adaptada al arco dental; adicionalmente se adhiere al esmalte con resina fotocurada y se retira despegándola de la superficie dental. Se ha encontrado que estas férulas son bien toleradas por los pacientes y solo le causa una leve molestia.

• Fijación con barra de arco: Hace varias décadas, la ferulización rígida de dientes era considerada necesaria, y los tipos de férulas empleadas eran barras de arco o cap splits. Estas férulas causaban daños considerables a los dientes lesionados, debido al reposicionamiento inexacto, lo que podría presionar el diente móvil contra la pared del alveolo. Además había riesgo de invasión bacteriana hacia la lesión periodontal debido a la cercana proximidad de la férula y alambres al margen gingival. Actualmente existen distintas variantes comerciales de barras de arco utilizadas principalmente en la reducción cerrada de fracturas mandibulares o maxilares. Uno de los más conocidos es el arco de Erich, compuesto por un metal relativamente suave que permite su adaptación al arco dental, este se fija mediante alambres (0,4mm) que rodean cada diente por debajo del tercio cervical de la corona, proporcionándole una adecuada estabilidad a la zona de la fractura. Por su rigidez este arco está indicado en fracturas del hueso alveolar, lo que facilita la reparación ósea, sin embargo puede causar daños al periodonto y mucosa bucal, por lo que la higiene y cuidado del paciente son fundamentales para el éxito del tratamiento.

 • Arco de alambre labial (Ridson): En esta técnica se utiliza un alambre de acero inoxidable que será el alambre pivote (0,4mm), se realiza alrededor del cuello de un molar y se trenza, midiendo previamente hasta donde será extendido en el arco. Luego se pasan alambres en cada diente (0,3-0,4 mm) alrededor del cuello, cada uno de trenzado sucesivo en el alambre pivote hasta alcanzar el molar de la hemiarcada opuesta; de esta forma el alambre principal o pivote cumple la función de arco, para brindar la estabilidad y rigidez en segmentos alveolares fracturados. La principal desventaja de este procedimiento es el daño periodontal y de la mucosa bucal. Es utilizado como una alternativa de ferulización rígida ante la carencia de materiales.

1.     Andreasen, J.O.  Lesiones traumáticas de los dientes. Editorial Labor. Barcelona. 1980.

2.     Canalda Sahli, Carlos, Brau Aguadé, Esteban. ENDODONCIA. Técnicas clínicas y bases científicas. Ed. Masson. Barcelona 2001. Capítulo 6 y 7

3.    Cohen, Stephen, Burns, Richard C. PATHWAYS OF THE PULP. 8th. ed. Mosby. St Louis. 2002. 1031 pp.

4.    Grossman, Louis I. PRACTICA ENDODÓNTICA. 4a ed. en español traducción de la 9a. ed. en inglés. Ed. Mundi. Buenos Aires. 1981pp. 501.

 

No hay comentarios.: