TRASTORNOS DEL LENGUAJE
INTRODUCCIÓN
El lenguaje es un conjunto de signos y
símbolos que permiten la comunicación entre los individuos. Hay un lenguaje
afectivo y otro proposicional o cognitivo.
El hombre, ser social por naturaleza, tiene
como principal vehículo de comunicación el lenguaje, la interpretación de la realidad,
la interacción y la transmisión cultural, con todo lo que ello implica, se hace
posible, fundamentalmente a través del lenguaje.
La presencia de un trastorno del lenguaje en
un niño lleva asociado, frecuentemente, dificultades en la interacción con su
entorno, rendimiento escolar deficiente, aislamiento, retraso en el desarrollo
cognitivo.
ANTECEDENTES
Las primeras evidencias sobre las
alteraciones del lenguaje se reportan en el Papiro de los Cirujanos Egipcios
Antiguos, que data aproximadamente del año 2800 antes de nuestra era.
Aparentemente, la primera descripción de una
alteración del lenguaje propiamente dicha, fue realizada en 1481 por A.
Guainerius, quien tuvo la oportunidad de observar varios pacientes. Uno de
ellos sólo podía pronunciar tres palabras, mientras que otro paciente no
recordaba los nombres de las personas con las que acababa de hablar.
DEFINICIÓN
Un “trastorno del habla o
lenguaje” se refiere a los problemas de la comunicación u otras áreas
relacionadas, tales como las funciones motoras orales. Estos atrasos y trastornos varían desde simples
substituciones de sonido hasta la inhabilidad de comprender o utilizar el
lenguaje o mecanismo motor-oral para el habla y alimentación.
ETIOLOGÍA
Algunas causas de los impedimentos del habla o lenguaje
incluyen la pérdida auditiva, trastornos neurológicos, lesión cerebral,
discapacidad intelectual, abuso de drogas, impedimentos tales como labio
leporino, y abuso o mal uso vocal. Sin embargo, con mucha frecuencia se desconoce
la causa.
EPIDEMIOLOGIA
En niños escolares sin signos de trastornos
neurológicos ni genéticos, la prevalencia de trastornos del lenguaje es del
2-3%; la prevalencia de trastornos del habla es del 3-6% [4,5]; por su parte,
la prevalencia en edad preescolar es mucho más alta, del 15%.
CLASIFICACIÓN
Transtornos
primarios
Los trastornos primarios se producen en el
periodo de adquisición del lenguaje oral y, no son derivados ni están asociados
a la pérdida auditiva, daño cerebral, déficit intelectual, trastornos motores,
factores afectivos o factores socio ambientales.
Trastorno
de la Articulación: Dislalia Funcional
Se trata de un sonido o fonemas que no se
produce de forma correcta, a pesar de ser percibido y ser diferenciado
normalmente de otros sonidos. El fonema afectado no aparece en el inventario
fonético del niño, ni en el lenguaje espontáneo, ni en el lenguaje repetido, ni
tampoco es capaz de realizarlo de forma aislada. La incorrección que produce es
estable, es decir, el fonema se realiza incorrectamente y siempre de la misma forma,
por ejemplo la situación del fonema r por el fonema g. Pero hay múltiples
dislalias que pueden afectar a la mayoría de fonemas.
Transtornos
fonológicos: Retraso del habla
Las dificultades se producen en la
adquisición del sistema fonológico. En principio en este transtorno, no
aparecen alteradas ni la comprensión oral ni el desarrollo morfosintáctico ni
el semántico. Pero dependiendo de la gravedad del trastorno, puede estar
afectado el uso del lenguaje y la intencionalidad comunicativa.
La
alteración puede situarse en el plano perceptivo (discriminación y memoria
auditiva) y/o en el organizativo (representación mental del sistema fonológico
en cuanto a la organización y secuenciación de los sonidos de la lengua). Con
frecuencia se asocian trastornos de articulación de uno o varios fonemas.
Retraso
del lenguaje
Este trastorno se caracteriza por presentar
dificultades en la adquisición de la forma, el uso y el contenido del lenguaje
oral.
Las características generales del retraso del
lenguaje son:
-
El núcleo del problema se centra en los
aspectos expresivos sobre todo en los fonológicos y semánticos.
-
El retraso en el desarrollo lingüístico es
homogéneo en todos los componentes del sistema.
-
El acceso al lenguaje oral se inicia un año o
año y medio más tarde de lo que suele ser habitual.
-
A pesar del retraso temporal, se observa una
evaluación paralela a la estándar en los rasgos característicos de cada una de
las etapas.
Trastorno
específico del lenguaje: Disfasia.
Este trastorno se caracteriza por presentar
severas dificultades en la adquisición del lenguaje oral, mostrando una
limitación significativa en la competencia lingüística oral.
Características
-
Distorsión y desorganización fonológicas
-
Habla ininteligible
-
Dificultad en el uso de nexos entre oraciones
-
Alteración del orden de los términos de la
frase
Transtornos secundarios
Son aquellos que se producen asociados o
derivados de alteraciones de tipo orgánico, en los que el trastorno del
lenguaje es un aspecto más dentro de la problemática general que presenta el
niño suelen generar en mayor o menor grado necesidades educativas permanentes.
Disglosias
Es un trastorno de la expresión oral debido a
alteraciones anatómicas y/o fisiológicas de los órganos articulatorios. Las
causas son de origen periférico: malformaciones congénitas craneofaciales,
trastornos de crecimiento, anomalías adquiridas como consecuencia de lesiones
en la estructura orofacial pude extirpaciones quirúrgicas. Se distinguen
distintos tipos en función del órgano del habla en el que se sitúe la
alteración: disglosias labiales, mandibulares, linguales, palatinas, dentales y
nasales. Las alteraciones anatómicas más frecuentes qué podemos encontrar son
el labio leporino y la fisura palatina.
Disartrias
Es un trastorno de la expresión verbal
causado por una alteración en el control muscular de los mecanismos del habla.
Comprende las disfunciones motoras de la respiración, fonación, resonancia,
articulación y prosodia. Son frecuentes en el lenguaje de los niños con déficit
motor, como consecuencia de alteraciones en el sistema nervioso central, como
es el caso de la parálisis cerebral.
En función de la localización de la lesión
distinguimos: disartria flácida, espástica, atáxica y discinética.
Afasias
La afasia se define como una privación o
alteración del lenguaje, provocada por una lesión cerebral focal en un
individuo que ya ha adquirido el lenguaje. Su origen puede ser vascular,
tumoral y traumático.
La clasificación más frecuente de las afasias
se hace en función de la localización de la lesión cerebral y podemos
diferenciar los siguientes tipos:
Afasia
de Broca o expresiva
La lesión está en la tercera circunvolución
frontal o circunvolución frontal inferior (área de Broca), se caracteriza por un
déficit primario de la expresión del lenguaje no estando comprometida la
comprensión.
Afasia
de Wernicke o receptiva
La lesión está en la parte posterior de la
primera circunvolución temporal del hemisferio izquierdo (área de Wernicke) se
caracteriza por una escasa comprensión verbal acompañada de un déficit de
lenguaje expresivo, aunque en menor medida.
Afasia
de conducción
Es el posible resultado de la evolución de
una afasia de Wernicke. Se caracteriza por una alteración moderada de la
expresión así como por una expresión entrecortada con frecuentes anomias y
parafasias.
Afasia
sensorial transcortical
Las áreas alteradas se sitúan por detrás de
la zona perisilviana, presentan buena repetición, comprensión alterada y
expresión caracterizada por la normalidad en relación al débito y a la prosodia
pero con la presencia de anomias significativas.
Afasia
global o total
La lesión destruye gran parte de las áreas de
lenguaje del hemisferio dominante, se caracteriza por un deterioro severo de
las capacidades de comprensión y expresión del lenguaje.
Afasia
infantil
Este tipo especial de afasia hace referencia
a aquel trastorno del lenguaje que se produce por una lesión cerebral en el
transcurso del desarrollo del lenguaje o una vez adquirido el mismo. Se
diferencia de la afasia en el adulto por el hecho de que la respuesta en el
cerebro infantil, es mucho más activa y plástica y porque muchos esquemas neurolingüísticos
no se han formado antes de producirse la
lesión. Presentan alteraciones en la emisión del lenguaje con reducción del
vocabulario, anomia y pobreza de lenguaje con simplificación de la sintaxis.
Otros trastornos del lenguaje oral:
Disfemia
La disfemia o tartamudez es un trastorno en
la fluidez del habla, caracterizado por repeticiones o bloqueos espasmódicos
que afectan el ritmo del lenguaje y a la melodía del discurso. Dentro de la
disfemia podemos distinguir los siguientes tipos:
-
Clónica: Caracteriza por la repetición
convulsiva de una sílaba o grupo de sílabas durante la emisión de la frase.
-
Tónica: Caracterizada por una interrupción
total del habla produciéndose al final una salida repentina de la emisión.
-
Mixta: Caracterizada por la combinación de
las dos anteriores, se puede empezar por una fase tónica y luego clónica o
viceversa.
Afonía
Es una pérdida total de la voz que puede
deberse a un estado inflamatorio agudo, a un traumatismo o a una parálisis
laríngea o a cuadro psíquicos histéricos. Este trastorno no es muy frecuente en
edad escolar.
Disfonía
Es una alteración en las cualidades de la
voz, timbre, tono, intensidad y duración en función de su origen. Pueden ser disfonías
orgánicas si existe una lesión en los órganos de fonación bien de tipo
congénito (malformaciones, parálisis), inflamatorio (laringitis) y traumático
(lesiones, quemaduras.
Disfonías funcionales: Si se deben a un mal
uso de la voz en este caso podemos distinguir las hipertónicas y las
hipotónicas. Las hipertónicas están provocadas por una excesiva tensión de las
cuerdas vocales durante la fonación, suelen darse en niños hiperactivos o
coléricos que están gritando continuamente hasta que las cuerdas bucales acaban
debilitándose.
Las hipotónicas se deben a que las cuerdas
vocales no cierran totalmente la glotis por falta de tensión muscular se suelen
dar en niños tímidos.
Mutismo
electivo
El mutismo electivo se define como una
ausencia total y persistente del lenguaje hablado en determinadas
circunstancias o ante determinadas personas. Los niños con mutismo selectivo,
generalmente tienen un buen desarrollo del lenguaje y son capaces de utilizarlo
en determinados contextos y con personas concretas. El diagnóstico diferencial
es inicialmente difícil o puede confundirse con una fobia escolar, con timidez
o depresión e incluso con rasgos psicóticos no obstante existen indicadores
suficientes para diagnosticarlo adecuadamente:
Exclusión de otros tipos de trastornos de
tipo psicológico sensorial físico o retrasos en el lenguaje.
Utiliza el lenguaje con normalidad en
determinadas circunstancias y no habla nunca en otras.
El período mínimo de persistencia del mutismo
es de 6 meses el lenguaje básico debe estar adquirido por tanto se trata de un
problema cuya edad de inicio no suele ser inferior a los 4 años.
La escuela suele jugar un papel importante en
la aparición y mantenimiento de este trastorno y puede intervenir favoreciendo
o dificultando su evolución; el mutismo se encuadra dentro de los trastornos de
tipo psicolingüístico.
CARACTERÍSTICAS CLÍNICAS
Ø Uso impropio de palabras y sus
significados
Ø Inhabilidad de expresar ideas
Ø Vocabulario reducido
Ø Inhabilidad de seguir instrucciones
Ø Generalmente son personas
introvertidas y con bajo autoestima
Una de
estas características o una combinación de éstas puede ocurrir en los niños que
sean afectados por discapacidades en el aprendizaje del lenguaje o atrasos en el
desarrollo del lenguaje. Algunos niños pueden escuchar o ver una palabra pero
no pueden comprender su significado; y al mismo tiempo, pueden tener
dificultades al tratar de comunicarse con los demás.
CARACTERÍSTICAS
ESTOMATOLÓGICAS
El aparato fono articulador, formado por los
labios, cavidad bucal, maxilar superior e inferior, paladar óseo y blando,
úvula, piezas dentarias, lengua y faringe, es el centro de la acción, ya que
aquí varios de los órganos integrantes entran en movimiento modificando su
propia forma en reposo, combinada así la conformación de la cavidad bucal, su
espacio y capacidad, con lo cual se logran los cambios, reducciones y aumentos de la columna del aire
espirado, que colocada en determinada posición logra un sonido específico;
cambiando levemente cualquier condición, ya sea posición de las estructuras o
presión de emisión.
-
Mordida cruzada
-
Mordida abierta anterior
-
Sobre
mordida vertical
-
Giro versiones de 45°
-
Pérdida de dientes
-
Inadecuada inserción de
frenillos bucales o lingual.
-
Macroglosia
DIAGNÓSTICO
El diagnóstico sólo debe hacerse cuando se cumplen los siguientes requisitos:
1- La gravedad del trastorno excede los límites normales teniendo en cuenta la edad mental del niño.
2- La Inteligencia no verbal es normal. Las funciones del lenguaje expresivo y receptivo están dentro de los límites normales.
3- Las anomalías de la
pronunciación no se pueden atribuir directamente a una anomalía sensorial,
estructural o neurológica.
Diagnóstico
diferencial:
Para este diagnóstico deberemos también asegurarnos de que las alteraciones en la articulación son lo suficientemente graves para considerarlas anormales y diferenciarlas de aquellas que pueden ser propias en niños pequeños. La historia clínica es de suma importancia.
TRATAMIENTO MEDICO
Los métodos de intervención en el lenguaje
han variado desde el trabajo directo con el niño, en situaciones estructuradas,
a otras formas más naturales basadas en el juego y en su propio ambiente con
implicación de los familiares.
Como objetivo general siempre hay que buscar
estimular y motivar al niño para que participe activamente. Desde este punto de
vista no se trata tanto de insistir en que el niño hable o comprenda
adecuadamente, sino de crear las condiciones para que el lenguaje tenga lugar
de forma espontánea.
El tratamiento más formal de los diferentes
trastornos suele efectuarse a través de la intervención logopédica. Hoy en día
disponemos de numeroso material de apoyo visual e informático que ofrecen un
contexto más amigable para los niños y, por tanto, mejorar su motivación en la
consecución de los diferentes objetivos marcados.
En los trastornos de pronunciación o
fonológicos, la intervención directa del logopeda con el niño en sesiones
estructuradas es muy eficaz. El tratamiento incluye un entrenamiento en la
producción de sonidos mediante ayudas visuales (gesticulación manual o símbolos
que ilustran la forma correcta de pronunciar) y la imitación del modelo
(logopeda). También se incluyen ejercicios para resolver las confusiones entre
diferentes fonemas.
Respecto a los otros trastornos del lenguaje
(expresión, comprensión o mixto) parece que la mejor opción, en general, pasa
por combinar el tratamiento logopédica individual con la intervención mediada
por la familia. En este último caso, el logopeda o profesional, tras
identificar el problema y marcar los objetivos, instruye a los padres en
diferentes habilidades para aplicarlas en casa con el niño.
TRATAMIENTO ESTOMATOLÓGICO
Corrección mediante
el uso de ortodoncia
Corrección o
sustitución protésica
Cirugía Maxilofacial
Cirugía periodontal
MEDICAMENTOS OTOTÓXICOS
DIURÉTICOS (Sulfonamidas)
Bumetanida
Furosemida
Piretanida
Torasemida
AINES
Ácido acetilsalicílico
Ácido Mefenámico
Indometacina
Naproxeno
Piroxicam
ANTIPALÚDICOS (Dvdos. quina)
Cloroquina
Pirimetamina
ANALGÉSICOS
Hidromorfona
ANESTÉSICOS
Óxido Nitroso
ANTIDEPRESIVOS
Mianserina
ANTIPSICÓTICOS
Clorpromazina
ANTIEPILÉPTICOS
Ácido Valproico
Carbamazepina
Gabapentina
|
ANTIBIÓTICOS
DE USO SISTÉMICO Aminoglucósidos
Amikacina
Esptreptomicina
Gentamicina
Kanamicina
Neomicina
Tobramicina
Anfenicoles
Cloranfenicol
Macrólidos
Azitromicina
Claritromicina
Eritromicina
Tetraciclinas
Minociclina
Otros
Metronidazol
Vancomicina
ANTITUBERCULOSOS
Capreomicina
ANTIMICÓTICOS
Amfotericina B
ANTIVIRALES
Didanosina
Ribavirina
Zidovudina
|
ANTINEOPLÁSICOS
Complejos
del platino
Carboplatino
Cisplatino
Oxaliplatino
Alcaloides
de la Vinca
Vinblastina
Vincristina
Vindesina
Vinorelbina
Antibióticos citostáticos
Bleomicina
Daunorubicina
Antimetabolitos
Fludarabina
Metotrexato
Agentes Alquilantes
Ciclofosfamida
Fotemustina
Ifosfamida
Taxanos
Paclitaxel
Otros
Etopósido
Bortezomib
OTROS
Deferoxamina
Metadona
Sildenafilo
|
FISIOLOGÍA DE LA AUDICIÓN
El
sonido entra al oído por el canal auditivo externo y hace que la membrana del
tímpano vibre. Las vibraciones transmiten el sonido en forma de energía
mecánica, mediante la acción de palanca de los huesecillos hacia la ventana
oval.
Después, esta energía mecánica es trasmitida por los líquidos del oído
interno a la cóclea, donde se convierte en energía eléctrica que viaja por el
nervio vestíbulo-coclear hacia el sistema nervioso central, donde es analizado
e interpretado como sonido en su forma final. Durante este proceso de
transmisión, las ondas sonoras encuentran protuberancias cada vez más pequeñas,
desde el pabellón auricular hasta la pequeña ventana oval, que resultan en
incremento de la amplitud (o volumen) del sonido.
Las ondas sonoras transmitidas por la membrana del tímpano a los
huesecillos del oído medio llegan al caracol, que es el órgano encargado de la
audición situado en el laberinto u oído interno.
Un huesecillo importante es el estribo, que
balancea y establece las vibraciones (ondas) en los líquidos contenidos en el
laberinto. Estas ondas líquidas, a su vez, causan el movimiento de la membrana
basilar que estimula a las células del órgano de Corti para moverse en forma de
onda. Los movimientos de la membrana estabilizan las corrientes eléctricas que
estimulan las diversas áreas de la cóclea. Las células ciliadas inician un
impulso nervioso que se codifica y transfiere a la corteza auditiva del
cerebro, donde se descodifica en la forma de un mensaje sonoro.
La
audición ocurre por dos mecanismos:
- La transmisión de sonidos por el aire en el
conducto auditivo externo y medio comprende la conducción aérea,
- y la que ocurre por los huesecillos del
oído medio es la conducción ósea.
En
personas con audición normal, la conducción aérea es más eficaz; sin embargo,
los defectos de la membrana timpánica o la interrupción de la cadena osicular
alteran la conducción normal del aire y causan pérdida de la proporción
sonido-presión y, por tanto, pérdida de la audición.
Podemos concluir diciendo que el ruido produce
lesiones (trauma sonoro) en principio sólo detectables en registro
audiométrico, y si la intensidad y/o tiempo son suficientes, provocará
hipoacusia. Esta disminución de la agudeza auditiva comienza de forma silente y
no es percibida por la persona hasta que no se alcanzan las frecuencias
conversacionales.
El
campo auditivo del hombre está entre los 16 y los 20.000 Hz. Por debajo de este
rango no se percibe sonido y sí una sensación de empuje y por encima, la
vibración entra en el límite de los ultrasonidos, no captables por el hombre
pero sí por la mayoría de los animales.
BIBLIOGRAFÍA
-
Lord, B. Alteraciones del lenguaje. Ed:
panamericana; México 1991. Pp: 149-159.
-
Rondal J. Trastornos del lenguaje. Ed:
Paidos. México 1991. Pp: 194-200.
-
Escotto E, Cols. Desarrollo y alteraciones
del lenguaje neuropsicología y genética de la inteligencia. Fes Zaragoza.;
México 2009. Pp: 175-201.
-
rabfis15.uco.es/lvct/tutorial/1/.../fisiologia%20de%20la%20audicion.htm
-
https://www.murciasalud.es/archivo.php?id=253991
No hay comentarios.:
Publicar un comentario